Los contenidos de este blog van desde la Psicología a la Antropología, pasando por la Historia o la Pedagogía. Esta mezcla abigarrada de disciplinas y temas tiene para mí un sentido claro y este sentido es que todas ellas son ciencias sociales o humanas, intensamente interconectadas unas con otras, debido a que todas ellas tienen un común objeto de estudio: el ser humano. Aunque cada una de ellas tenga su propia metodología e instrumentos de trabajo y de análisis, que les otorgan su propia personalidad.

miércoles, 27 de diciembre de 2023

Sevilla, vórtice del flamenco

      Solemos oir decir que tal o cual sitio es "capital" del flamenco o de cualquier otra cosa. Esa manía, de ser cabeza de algo, se nos antoja reflejo de cierto complejo de inferioridad y de ansia por ser "algo".

     Sin embargo, sí creemos que Sevilla es un vórtice donde se fragua la tempestad flamenca. Naturalmente que no pensamos que Sevilla sea el único vórtice, pero sí que es de los más fuertes.

     Claro que esos "vórtices" no se alimentan con cualquier fuerza. Esas fuerzas que hacen girar el "ciclón" flamenco, ya las hemos mencionado aquí y en otros lugares. Se trata, ni más ni menos de: a) el apego a la tierra andaluza (el territorio), b) la interculturalidad e interetnicidad, y c) un complejo de técnicas musicales y poéticas específicas del flamenco. En ningún otro lugar que no sean Andalucía o sus zonas fronterizas, se puede dar la confluencia de esas fuerzas. De modo que olvídense los que pretenden este latrocinio cultural, porque sólo son cabeza de bandas dedicadas al expolio cultural.

     Pueden, estos expoliadores, imitar el flamenco o consumirlo como producto cultural, pero jamás serán génesis del flamenco, ni expresarán lo que éste expresa.

     Sevilla es vórtice donde convergen esas fuerzas, porque es cruce de caminos, porque su ubicación en el corazón del Valle del Guadalquivir la hace sensible al arraigo en la tierra, esa tierra tan en disputa, tan alienada por razones clasistas, étnicas, religiosas.... También es vórtice, porque en ella han convergido -y convergen- hasta fundirlas las influencias de las tres etnias fundamentales, la castellana, la andalusí y la gitana, además de ser capaz de absorber las foráneas (de América, afroamericana, sefardí, gallega, navarro-aragonesa...). Y tiene el suficiente peso demográfico como para que en ella haya el número mínimo de conocedores de las técnicas, como para que éstas tengan facilidad para difundirse.

     En otros lugares de Andalucía, se han dado circunstancias parecidas, y han actuado fuerzas sociales y culturales semejantes, por lo que también han sido capaces de generar formas y palos flamencos.

     Es decir, nos inclinamos a pensar que el flamenco no tiene un sólo foco en Andalucía, y que la mayoría de ellos están en ella. Mientras que lo que mantiene la unidad del flamenco, es la continua interacción e intercambio de esos focos.

jueves, 21 de diciembre de 2023

Edición mejorada de libro


 



     Finalmente fue Matilde Durán Curado, la que intervino en la presentación del libro, en el lugar de Esteban, que no pudo acudir por cuestiones personales. Matilde lo hizo estupendamente y el público estuvo espléndido. Gracias a todos y a todas, y al Excelentísmo Ateneo de Sevilla.









miércoles, 1 de noviembre de 2023

Pitágoras y el duende

De algún modo podríamos decir que el duende flamenco es incompatible con la teoría musical de Pitágoras, y que, aunque puede ser que las matemáticas sean la base de la música, podemos pensar también que esas matemáticas no son, necesariamente, las de Pitágoras, sino que algunos tipos de música (como el flamenco o el jazz) se rigen por algo parecido al principio de Heisenberg.

jueves, 12 de octubre de 2023

Nuevo artículo: Apropiación cultural y concientización

 

     En este libro, que acaba de aparecer está un artículo mío, basado en una intervención en el Congreso de Música e Inclusión, organizado por la UCLM, el pasado mes de mayo.: 

Sinfonías del Cambio: Música y Arte en la Transformación Social



martes, 3 de octubre de 2023

La turistificación

 En cualquier lugar del mundo, parece que los que quieren "demostrar preocupació e interés por su ciudad o por su entorno, arremeten contra la turistificación; actitud que parece hipócrita cuando a más de uno de los que así apinan, se les ve embuidos de un frenesí pro quienes más viajes acumulan anécdotas y selfies en elextranjero muestran a sus amigos y amigas.

La soleá de Triana

 Todo flamenco

domingo, 10 de septiembre de 2023

La guitarra y el flamenco

     A veces nos preguntamos si hubiéramos tenido flamenco, en el caso de que no hubiese existido la guitarra. La respuesta fácil a esa pregunta habría sido: sí, puesto que existen los llamados "cantes al aire", que se cantan "a palo seco", o dicho en otro idioma "a capella". Sin embargo, dicha respuesta está cerca de ser simplista, porque la contribución de la guitarra flamenca (desarrollada a partir de la antigua guitarra morisca) va más lejos quel simple acompañamiento; y su influencia hace las veces de inspiradora de muchos sonidos, incluso en el caso de los cantes sin guitarra, o con acompañamientos en los que la guitarra hace de contrapunto para algo más que seguir la melodía principal.

     La guitarra condiciona al flamenco porque su tesitura es más estrecha que la de otros instrumentos como él piano. En concreto, ésta va desde Mi2 hasta Si5. Es decir, 3 octavas con 12 semitonos por cada octava. Y esta estrechez acaba condicionando a la voz humana para que no vaya más allá.

     Según esta distribución, tenemos que el flamenco, si se basa en la guitarra para emplear los sonidos que salen de ella, como base de sus creaciones, resulta perjudicado con respecto a otras músicas que lo hacen basándose en el piano.

     Pero resulta que el flamenco puede llegar a registrar cuartos de tono, por lo que esos 36 semitonos pueden llegar a ser 72 cuartos de tono. Esta cifra es más pareja a los 88 de las músicas basadas en el piano (aunque raro es que alguna de ellas llegue a registrar tantos sonidos diferentes).

     La situación vuelve a cambiar a favor del flamenco, si consideramos las notas musicales sin solución de continuidad, y no como quantums de sonidos rígidos. Entonces el balance resulta favorable al flamenco.

     Alguien se preguntará, ¿cómo se consiguen esos cuartos de tono?, pues con los ligados, mordientes, pulsaciones en el mástil... acordes "imposibles"...

     Si pensamos entonces en que la voz flamenca va en combinación con  los sonidos de la guitarra, entonces veremos que se condicionan el uno al otro, y que las voces flamencas se mueven en la tesitura de la guitarra, más limitada que la de otras músicas. Ambas se vieron en un principio, seguramente, influenciadas, por otro instrumento aparentemente ajeno, y cuya introduccióoon, posiblemente por Zyriab, provocó una revolución en la música andalusí: el ravel (rebbad), precursor del violín (¿a quién le puede extrañar lo bien que encaja el violín en algunas creacciones  innovadoras del flamenco?).

     Pero, como compensación, la complejidad de buscar las armonías (intuitivamente, en la mayor parte de los casos), entre tonos, semitonos, cuartos de tono... es tan difícil que, en la práctica, lleva a soluciones técnicas más adelantadas que las de la música "pitagórica". Posiblemente, esa confrontación armónica que hubo en su momento entre la cuerda  pulsada y la frotada, condujo a hallazgos que han aprovechado las voces flamencas desde cuando este arte fue surgiendo. Posiblemente ésta sea una de las peculiaridades del flamenco que traen más de cabeza a los academicistas de los conservatorios de música.

     Otra característica de la música que tiene como base a la guitarra, viene derivada  de la técnica del rasgueo. Esta técnica tiene la peculiaridad de que en ella los acordes no se forman por la pulsión de  varias notas a la vez, sino de una detrás de otra. Incluso el rasgueo parece una técnica intermedia entre la cuerda frotada y la pulsada. Ademáas, esta pulsióon ssssecuencial de las notas provoca que, mientras laa ot anterior aún ontinúa resonando, aparece el siguuuiente sonido, que se monta sobre el anterior: el efecto sonoro es muy diferetttte a cuando se pulsan todas las cuerdas a la vez (excepción hecha de los arpegios y trémolos, por ejemplo).

     Todas estas peculiaridades técnicas, arrastran a la voz humana hacia unos matices que en otras músicas son imposibles.

     En definitiva, en función de los argumentos anteriores, la evolución del flamenco va en paralelo con la de la guitarra y ambos contribuyen con su infllujo en el desarrollo del otro.

sábado, 1 de julio de 2023

¿En manos de quienes se queda la enseñanza del flamenco?



     La nueva ley del flamenco es un avance indudable én la protección del flamenco, en cuanto que provee mecanismos y recursos para su protección y difusión. Sin embargo, hay dos ausencias que pueden producir preocupación:

- No hay ninguna mención a la herencia andalusí.

- No aclara quienes enseñarán flamenco en la educación reglada.




El Decreto dice así:

"TÍTULO IV

DE LA ENSEÑANZA DEL FLAMENCO

Artículo 23. Presencia del flamenco en el sistema educativo andaluz.

1. La Administración educativa incluirá el aprendizaje y el conocimiento del flamenco en las distintas etapas de la enseñanza no universitaria, mediante la inclusión de saberes básicos y el desarrollo de situaciones de aprendizaje relacionadas con el flamenco ya sea dentro del horario lectivo o bien como actividades complementarias y extraescolares, contando para estas últimas con artistas y profesionales del sector del flamenco.

2. Se fomentará la difusión del estudio del flamencoque se lleva a cabo en los centros de enseñanzas artísticas de Música y Danza, con la participación de profesorado titulado en las enseñanzas artísticas superiores de Música y Danza por las especialidades de Interpretación de Instrumentos de Flamenco, Flamencología, Baile Flamenco y Pedagogía del Baile Flamenco.

3. La presencia del flamenco desarrollada en este artículo se realizará como parte de asignaturas, actividades e investigaciones sobre la identidad cultural e histórica de Andalucía.

Artículo 24. Formación del profesorado.

1. La Administración educativa, con la participación de la Consejería competente en materia de cultura y patrimonio histórico, incorporará en el plan de formación anual del profesorado, tanto inicial como permanente, programas y actividades formativas en flamenco adecuadas a las demandas efectuadas por los centros docentes.

2. Estas actividades podrán ser impartidas por profesorado titulado en las enseñanzas artísticas superiores de Música y Danza y especializado en los distintos itinerarios relacionados con el flamenco, así como por artistas, profesionales y otras personalidades del ámbito flamenco, e irán orientadas a la elaboración de materiales curriculares y recursos didácticos que favorezcan la inclusión del flamenco en el sistema educativo andaluz.

3. En la definición del contenido de los programas y actividades de formación del profesorado en materia de flamenco y de las actividades formativas que sean impartidas en materia de flamenco, se contará con la participación y el asesoramiento de profesionales del sector, así como de titulados en enseñanzas artísticas superiores de música y danza y especializados en flamenco, en sus diferentes itinerarios.

4. Podrá recabarse para el desarrollo de las actividades formativas del profesorado en materia de flamenco la colaboración de entidades locales, de entidades representativas del mundo del flamenco, de artistas, profesionales y otras personalidades del ámbito flamenco, y de organizaciones representativas de la vida social y cultural de Andalucía"

     Sin embargo, no parece que haya suficiente número de profesionales para cubrir esas necesidades, y estaremos a la espera de ver cómo se implementa el flamenco en institutos y colegios, pero si se recurre como base a los academicos, la cosa puede ir mal; porque muchos de ellos no entienden el flamenco, música muy distinta a la tonal, y, algunos de ellos, hasta lol desprecian. , .

domingo, 28 de mayo de 2023

Vueltas sobre sí misma

 La Humanidad ha llegado a tal grado de narcicismo que sólo sabe dar vueltas sobre si misma, y nos preguntamos si es posible un verdadero progreso.

Siempre nos ha atraído el evolucionismo, pero la realidad se empeña en desengañarnos. Cuando creemos ir avanzando, en realidad lo que hacemos es dar vueltas en círculo. Cambiamos, pero nuestros vicios y virtudes parecen ser siempre los mismos: ¿somos una especie estancada, sin posibilidades de mejorar?

Para responder a estas preguntas, quizás sería necesario saber primero qué es felicidad, y ahí parece que es dónde reside la dificultad.

viernes, 17 de febrero de 2023

¿Consumir flamenco o crear flamenco?

     Hemos oído en algunas ocasiones que el flamenco es nuestra música clásica. En relación con esto, y recordando el título de un conocido programa de televisión (clásicos populares). sólo que en el caso del flamenco, podríamos decir que éste es más una música popular que se ha hecho clásica que al revés, no una música clásica que se ha hecho popular. Porque el flamenco es popular o no es flamenco. Pero ¿qué es popular?¿lo que sale del pueblo o lo que el pueblo admira, porque está producido por gente que el pueblo admira, porque se les considera los mejores ejecutantes?: los "artistas". Pero esa es una forma pasiva de vivir la cultura, pues de este modo ésta pierde gran parte de su valor como vehículo de expresión de lo colectivo; parte de ese colectivo queda alienado de ese producto cultural, desplazándose el proceso creativo de ese producto cultural hacia fuera de sus límites naturales. Es decir, se produce una alienación del flamenco de sus creadores y legítimos propietarios: los andaluces, y todos cuantos pertenecen a su área cultural. Es decir, se produce un latrocinio cultural.

     Algunos dirán: bueno, es un producto cultural andaluz, pero ahora es universal, y pertenece a toda la humanidad, tal y suelen afirmar del jazz, por poner un ejemplo similar.

     Pero este latrocinio planificado está disfrazado de hurto casual y muchos caen en la trampa de confundirlos. Y sin embargo, no es un hurto casual, porque quienes defienden ese supuesto universalismo del flamenco, lo hacen desligándolo de su fuente, lo que en el caso del flamenco equivale a dejarlo inerme. Y de paso, aprovechan para comercializarlo y venderlo como un producto comercial más. Una vez en el mercado, el flamenco se convierte en producto más con el que se mercadea, y del que se intentan obtener plusvalías. A partir de esta realidad, se desencadena una dinámica que potencia a los ejecutan bien ese producto cultural (los artistas) y deja al margen a "los aficionados"; de este modo, la mayor parte de los miembros de la cultura que produce el flamenco, queda reducida a un papel de consumidores de cultura, mientras que ésta, supuestamente, la producen muchos creadores ajenos a la cultura de origen.

     Y así, una vez convertidos en meros consumidores del flamenco, se consuma el proceso de alienación del flamenco a los andaluces.

viernes, 20 de enero de 2023

¿Son los intelectuales una clase social?

      ¿Son los intelectuales una clase social, o más bien debemos pensar que cada clase social tiene sus propios intelectuales? Nosotros nos inclinamos por la segunda opción.

     Es como si en cada clase social, estuviera reservada sólo a unos pocos, a la reflexión y la construcción de un cuerpo teórico síntesis, de los intereses de esa clase. Sin embargo, desde los progresistas o desde los conservadores, se han alzado en general voces contra los intelectuales en general; quizás sin darse cuenta de que algunos los representan a ellos.

     Cabe también preguntarse qué es eso de ser un intelectual. En virtud de lo sugerido antes, parece que ser intelectual implica ser capaz d una buena aptitud para la metacognición. Es decir, que no basta con ser inteligente: ya que ser capaz de ver en perspectiva lo que uno o los demás piensan, sin dejarse llevar por la opinión más generalizada, se perfila como un importante elemento de esa metacognición. Esto último, no necesariamente es lo mismo que lo que algunos llaman "pensamiento lateral"; sino que más bien parece una competencia más de la inteligencia... u otro tipo de inteligencia, o una forma de cognición distinta de lo que, comúnmente, llamamos inteligencia.

     En realidad, todas estas dudas nos llevan a recordar que es precisa una revisión profunda del concepto de inteligencia. Para ello deberíamos desechar definitivamente los viejos tests que nos ligan a ese antiguo concepto,  e intentar comprenderla de una manera distinta: quizás tenga la inteligencia más que ver con el sentido crítico, o el deseo de conocer, o el reconocimiento  y respeto por las normas de convivencia social.... Sólo quizás entonces, podremos empezar a diseñar nuevos instrumento de medición que nos ayuden a entender cómo pensamos.

     Este enfoque de la cuestión puede llevarnos a conclusiones sorprendentes; la primera estaría derivada de la posible naturaleza dicotómica (o cuasi) de la metacognición; es decir, que se tiene o no se tiene. Por el contrario, la inteligencia tradicional, parece tener más que ver con la corteza asociativa del cerebro, y su incidencia es mâs bien en forma de variable continua.

     Pero volviendo al tema de la relación entre los intelectuales y la metacognición, habría que recordar que el término intelectual se le atribuye generalmente a quienes reflexionan sobre el see humano o su sociedad. A los pensadores sobre lo no humano ss les suele llamar científicos. Sin embargo, a todos ellos los podemos considerar usufrutuarios de la metacognición.

     Una pregunta que nos podemos hacer es si la metacognición puede ser adquirida o no.  Pregunta que nos solemos hacer cuando constatamos que un gran número de personas no se cuestiona nunca lo que cree saber de la realidad, o se conforman con la que les dan otros.

     A falta de un estudio empírico detallado, tenemos la sensación de que existen personas muy inteligentes que no alcanzan a utilizar la metacognición; es decir, lo que en alguna medida, puede decirse que es autoprogramarse.

    Y atendiendo al doble carácter de esta entrada (el psicológico y el sociológico)